A continuación exponemos las tres subclases de anfibios.
ANUROS:
Los anuros cuyo nombre significa sin cola, son los también llamados saltadores, es decir ranas y sapos dependiendo de si los hábitos del animal son acuáticos o terrestres. Se conocen unas 3000 especies en todo el mundo. Estos anfibios pierden su cola en el paso de estado larvario a estado adulto. Son de aspecto rechoncho, sin cuello y de ojos saltones. Sus extremidades delanteras tienen cuatro dedos libres, y las traseras, mucho más largas y musculosas, pues están adaptadas al salto están formadas por cinco dedos unidos por una membrana, existen, además, ejemplares arborícolas q tienen discos adhesivos en los extremos de los dedos. Su piel es de distintos colores dependiendo del entorno. Los machos emiten sonidos expirando por las cuerdas vocales pudiendo ser amplificados en unos sacos bucales a forma de caja de resonancia. Su esqueleto es óseo y cartilaginoso.
Algunas especies de sapos incuban los huevos en unas bolsas situadas bajo sus patas o en repliegues en la espalda, pero la fecundación es siempre externa.
-Dimorfismo Sexual:
Los machos de los anuros presentan la capacidad de producir sonidos(croar) por medio de unos sacos bucales más o menos aparentes en función de la especie, así como protuberancias a nivel de extremidades anteriores, órganos genitales particulares, etc.
El tamaño pese a poder servir como distintivo no es de las características más definitorias y conlleva errores al no existir una regla fija aplicable a todas las especies.
-Apareamiento:
El lugar más común de apareamiento de los anuros es en el medio acuático. El apareamiento ocurre muchas veces mediante el amplexo.
El amplexo consiste en que el macho se aferra fuertemente al dorso de la hembra y de esta manera cuando ésta deposita los huevos los fecunda con su esperma es lo que llamamos fecundación externa.
Existen dos tipos de amplexos: axilar y lumbar. En el amplexo axilar, los machos retienen a las hembras apretando sus brazos a nivel de las axilas mientras que en el amplexo lumbar es a la altura de las caderas.
-Puesta de huevos y desarrollo larvario:
Los anuros en su gran mayoría son animales ovíparos (puesta de huevos en el medio externo), a partir de estos huevos saldrán unas larvas que reciben el nombre de renacuajos. No todos los anuros son ovíparos, hay anuros de son vivíparos como los Nectophrynoides
Dentro de los anuros se caracteriza que el macho lleva los huevos desde la puesta hasta el momento de la eclosión en sus patas posteriores. Dejando las formas clásicas de deposición de huevos, en algunas especies se da la formación de nidos de espuma que forman las hembras batiendo el agua con ayuda de sus extremidades y dentro de este nido introduce los huevos.
De los huevos nacen unas larvas que en el caso de los anuros se denominan renacuajos. Cuando salen del huevo, los renacuajos presentan branquias externas y están provistas de una cola para desplazarse. Con el tiempo, las branquias se interiorizan y aparecen las extremidades posteriores. Una vez que se forman las extremidades posteriores, aparecen las anteriores y los renacuajos dejan de comer (se alimentan de las reservas presentes en la cola que se irá reabsorbiendo.)
Finalmente sufren la etapa final que es la metamorfosis. La metamorfosis es un proceso hormonal ligado a la tiroides donde empiezan su ingreso en el medio terrestre donde comenzarán a alimentarse de pequeños invertebrados y dejarán de ser organismos totalmente acuáticos.
SAPOS:
Sapo común: Bufo bufo. Presenta un área de distribución muy amplia, va desde el sur de España hasta el centro de Suecia, extendiéndose por toda Europa.
Se trata del anuro más grande que tenemos en la Península Ibérica, y es el sapo más grande que hay en Europa. Es un sapo grande, cuyas hembras más robustas pueden superar los 15 cm de longitud.
La coloración es variable e influye mucho la zona geográfica de donde proceda el animal, pero generalmente presentan un dorso de color marrón parduzco y un vientre de color claro.
Sapo común: Bufo bufo. Presenta un área de distribución muy amplia, va desde el sur de España hasta el centro de Suecia, extendiéndose por toda Europa.Se trata del anuro más grande que tenemos en la Península Ibérica, y es el sapo más grande que hay en Europa. Es un sapo grande, cuyas hembras más robustas pueden superar los 15 cm de longitud.
La coloración es variable e influye mucho la zona geográfica de donde proceda el animal, pero generalmente presentan un dorso de color marrón parduzco y un vientre de color claro.
Características de este sapo son sus grandes glándulas parótidas, que sobresalen en forma de haba a lado y lado de su cabeza, justo detrás de los ojos. A través de ellas, el animal excreta un líquido blanquecino que le sirva para ahuyentar a sus posibles depredadores.
Sus ojos son brillantes con pupila horizontal y un color de iris que va desde el amarillo oscuro hasta el cobrizo.
El dorso está recubierto de verrugas.
Sus ojos son brillantes con pupila horizontal y un color de iris que va desde el amarillo oscuro hasta el cobrizo.
El dorso está recubierto de verrugas.
En cuanto a sus extremidades presenta las exteriores mucho más desarrolladas, y sólo encontramos membrana interdígita en éstas. Las delanteras presentan 4 dedos, y las traseras 5.
Los machos no presentan saco vocal.
Hábitat: se trata de una especie poco exigente que coloniza los más diversos tipos de hábitats, y ésto explicaría el porqué su área de distribución es tan extensa.
Vive en jardines de ciudades, orillas de estanques, bosques de caducifolios, etc. Pero no habita en lugares encharcados, o sea, que no lo veremos como las ranas en un arroyo o estanque, sino más bien prefiere lugares húmedos pero que no haya agua encorada.
Es un sapo activo a una temperatura ambiental superior a los 10ºC, de lo contrario, hiberna. Suele salir después de una tormenta o si no, durante la noche.
No se desplaza a grandes saltos, de hecho realiza más bien caminatas, y sólo salta si está en peligro.
Se nutre de gran diversidad de invertebrados: grillos, limacos, polillas... ingerirá todo aquellos que se mueva y le quepa por la boca.
Dimorfismo sexual: los machos son más pequeños que las hembras, algo . Aparte, los machos tienen la capacidad de emitir sonidos, sin embargo, al no presentar saco vocal, su canto no llega muy lejos.
Durante la época de reproducción, los machos presentan unas callosidades negruzcas en la parte de debajo de los tres primeros dedos de las extremidades anteriores y les permiten aferrarse a las hembras durante la cópula. Esto explica el porqué cuesta tanto separar a dos sapos en amplexo.
Estos anuros recuerdan con gran precisión el lugar donde nacieron, y tras muchos estudios para saber cómo lo consiguen, se cree que influirían las fases lunares e interacciones con el campo magnético terrestre.
Año tras año, los sapos realizan migraciones en masa hacia los frezaderos que son precisamente las aguas donde años antes nacieron ellos.
De todos modos, se ha visto que si de camino encuentran un frezadero que cubra sus necesidades también lo utilizan, creando una nueva colonia. En este sentido no son anda exigentes y capaces de colonizar con bastante rapidez los frezaderos artificiales que colocan los aficionados a la herpetología.
Las puestas son numerosas y puede haber más de 100 huevos. Éstos son muy característicos y se disponen en forma de dos cordones gelatinosos que quedan enganchados en las plantas
El amplexo (cópula), tiene lugar en el frezadero mediante un abrazo del macho por las exilas de la hembra (amplexo axilar), pero no es raro ver a hembras que se dirigen a un frezadero con una serie de machos que se les enganchan sin esperar a llegar al lugar de la puesta. El resultado tras la eclosión de los huevos, es la aparición de unos pequeños renacuajos de color negro muy característicos e inconfundibles con ninguna otra especie de nuestra fauna anfÍbica. Después de la metamorfosis, ingresan en tierra unos sapos juveniles que escasamente llegan a 1 o 2 cm de longitud y los cuáles tendrán que pasar varios años hasta llegar a la madurez sexual.
RANAS:
Rana bermeja: Es una especie ampliamente distribuida por toda Europa. Abarca toda la mitad norte de este continente hasta los Urales, incluyendo las zonas más boreales y las Islas Británicas. Hacia el sur, penetra por los Alpes, Balcanes, Pirineos y Sierra Cantábrica.
Su distribución en España a partir de los 1000m de altitud como ocurre con el tritón pirenaico.
Es un anuro de tamaño medio que puede alcanzar los 10cm de longitud cuando es adulto. Presenta un cabeza ancha y un morro redondeado. Sobre la cabeza, destacan dos grandes ojos de pupila horizontal y a cada lado, pueden observarse los tímpanos bien visibles.
La rana bermeja tiene unas extremidades posteriores moderadamente largas y decimos “moderadamente” porque si realizamos la prueba del talón, nos percataremos que no superan el hocico del animal.
Su piel es lisa con pequeñas rugosidades laterales. El dorso presenta una coloración variables pero tirando al pardo rojizo mientras que el vientre es blanco amarillento. Las hembras, en época de reproducción, presentan manchas oscuras y bandas en las patas posteriores.
Suele permanecer en las cercanías de los cursos de agua y huye zambulléndose en el agua a la menor señal de peligro. De todos modos, si el tiempo no es muy caluroso, podemos encontrarla bastante lejos de los cursos de agua.
Es una especie de hábitos tanto nocturnos como diurnos dependiendo de la climatología. Si hace calor, las ranas se retiran a escondrijos y no salen hasta el anochecer.
Se nutre de toda clase de invertebrados: lombrices, afímeras, dípteros, mariposas, etc... Al llegar la época de reproducción, los machos desarrollan callosidades nupciales de coloración oscura que resultan bien visibles. Éstas les permiten aferrarse al escurridizo cuerpo de sus compañeras durante el amplexo axilar. A su vez, las hembras desarrollan unas granulaciones blanquecinas en los flancos con mismo fin.
Las ranas salen de las cavidades donde han hibernado en cuanto empieza a fundirse la nieve. Se produce una migración masiva hacia las charcas natales y llegan ambos sexos prácticamente al mismo tiempo. Los machos empiezan a hinchar sus sacos vocales por la tarde y por la noche para atraer a las hembras con sus ronquidos.
En las dos semanas siguientes, todas las ranas de la zona se han reproducido. Los machos se aferran a sus compañeros por medio de un amplexo axilar que, al primer contacto debido a la fuerza del macho, provoca la expulsión inmediata de todos los huevos.
Las hembras expulsan los huevos en forma de bolas compactas, generalmente 2 por puesta, que pueden contener entre 700 y 4500 huevos. Estas bolsas se hinchan al entrar en contacto con el agua. La duración del desarrollo embrionario depende de la temperatura ambiental. Lo usual son 2 semanas, pero si la temperatura del agua es muy inferior, puede durar hasta un mes. Curiosamente, la cara oscura del huevo se sitúa cara al sol para absorber radiación y conseguir la temperatura necesaria para desarrollarse.
Los renacuajos presentan el espiráculo en el lado izquierdo. Su coloración es negra al nacer, pero conforme avanza su desarrollo, se van aclarando hasta tener una coloración marronosa. No es raro que hayan machitas doradas tanto en el vientre como en la cola de los renacuajos. La vida media de estos anuros es de unos 10 años.
Las ranas, al igual que muchos otros anfibios, pueden ser venenosas, a continuación, mosatramos una rana venenosa.
Los machos no presentan saco vocal.
Hábitat: se trata de una especie poco exigente que coloniza los más diversos tipos de hábitats, y ésto explicaría el porqué su área de distribución es tan extensa.
Vive en jardines de ciudades, orillas de estanques, bosques de caducifolios, etc. Pero no habita en lugares encharcados, o sea, que no lo veremos como las ranas en un arroyo o estanque, sino más bien prefiere lugares húmedos pero que no haya agua encorada.
Es un sapo activo a una temperatura ambiental superior a los 10ºC, de lo contrario, hiberna. Suele salir después de una tormenta o si no, durante la noche.
No se desplaza a grandes saltos, de hecho realiza más bien caminatas, y sólo salta si está en peligro.
Se nutre de gran diversidad de invertebrados: grillos, limacos, polillas... ingerirá todo aquellos que se mueva y le quepa por la boca.
Dimorfismo sexual: los machos son más pequeños que las hembras, algo . Aparte, los machos tienen la capacidad de emitir sonidos, sin embargo, al no presentar saco vocal, su canto no llega muy lejos.
Durante la época de reproducción, los machos presentan unas callosidades negruzcas en la parte de debajo de los tres primeros dedos de las extremidades anteriores y les permiten aferrarse a las hembras durante la cópula. Esto explica el porqué cuesta tanto separar a dos sapos en amplexo.
Estos anuros recuerdan con gran precisión el lugar donde nacieron, y tras muchos estudios para saber cómo lo consiguen, se cree que influirían las fases lunares e interacciones con el campo magnético terrestre.
Año tras año, los sapos realizan migraciones en masa hacia los frezaderos que son precisamente las aguas donde años antes nacieron ellos.
De todos modos, se ha visto que si de camino encuentran un frezadero que cubra sus necesidades también lo utilizan, creando una nueva colonia. En este sentido no son anda exigentes y capaces de colonizar con bastante rapidez los frezaderos artificiales que colocan los aficionados a la herpetología.
Las puestas son numerosas y puede haber más de 100 huevos. Éstos son muy característicos y se disponen en forma de dos cordones gelatinosos que quedan enganchados en las plantas
El amplexo (cópula), tiene lugar en el frezadero mediante un abrazo del macho por las exilas de la hembra (amplexo axilar), pero no es raro ver a hembras que se dirigen a un frezadero con una serie de machos que se les enganchan sin esperar a llegar al lugar de la puesta. El resultado tras la eclosión de los huevos, es la aparición de unos pequeños renacuajos de color negro muy característicos e inconfundibles con ninguna otra especie de nuestra fauna anfÍbica. Después de la metamorfosis, ingresan en tierra unos sapos juveniles que escasamente llegan a 1 o 2 cm de longitud y los cuáles tendrán que pasar varios años hasta llegar a la madurez sexual.
RANAS:
Rana bermeja: Es una especie ampliamente distribuida por toda Europa. Abarca toda la mitad norte de este continente hasta los Urales, incluyendo las zonas más boreales y las Islas Británicas. Hacia el sur, penetra por los Alpes, Balcanes, Pirineos y Sierra Cantábrica.
Su distribución en España a partir de los 1000m de altitud como ocurre con el tritón pirenaico.
Es un anuro de tamaño medio que puede alcanzar los 10cm de longitud cuando es adulto. Presenta un cabeza ancha y un morro redondeado. Sobre la cabeza, destacan dos grandes ojos de pupila horizontal y a cada lado, pueden observarse los tímpanos bien visibles.
La rana bermeja tiene unas extremidades posteriores moderadamente largas y decimos “moderadamente” porque si realizamos la prueba del talón, nos percataremos que no superan el hocico del animal.
Su piel es lisa con pequeñas rugosidades laterales. El dorso presenta una coloración variables pero tirando al pardo rojizo mientras que el vientre es blanco amarillento. Las hembras, en época de reproducción, presentan manchas oscuras y bandas en las patas posteriores.
Suele permanecer en las cercanías de los cursos de agua y huye zambulléndose en el agua a la menor señal de peligro. De todos modos, si el tiempo no es muy caluroso, podemos encontrarla bastante lejos de los cursos de agua.
Es una especie de hábitos tanto nocturnos como diurnos dependiendo de la climatología. Si hace calor, las ranas se retiran a escondrijos y no salen hasta el anochecer.
Se nutre de toda clase de invertebrados: lombrices, afímeras, dípteros, mariposas, etc... Al llegar la época de reproducción, los machos desarrollan callosidades nupciales de coloración oscura que resultan bien visibles. Éstas les permiten aferrarse al escurridizo cuerpo de sus compañeras durante el amplexo axilar. A su vez, las hembras desarrollan unas granulaciones blanquecinas en los flancos con mismo fin.
Las ranas salen de las cavidades donde han hibernado en cuanto empieza a fundirse la nieve. Se produce una migración masiva hacia las charcas natales y llegan ambos sexos prácticamente al mismo tiempo. Los machos empiezan a hinchar sus sacos vocales por la tarde y por la noche para atraer a las hembras con sus ronquidos.
En las dos semanas siguientes, todas las ranas de la zona se han reproducido. Los machos se aferran a sus compañeros por medio de un amplexo axilar que, al primer contacto debido a la fuerza del macho, provoca la expulsión inmediata de todos los huevos.
Las hembras expulsan los huevos en forma de bolas compactas, generalmente 2 por puesta, que pueden contener entre 700 y 4500 huevos. Estas bolsas se hinchan al entrar en contacto con el agua. La duración del desarrollo embrionario depende de la temperatura ambiental. Lo usual son 2 semanas, pero si la temperatura del agua es muy inferior, puede durar hasta un mes. Curiosamente, la cara oscura del huevo se sitúa cara al sol para absorber radiación y conseguir la temperatura necesaria para desarrollarse.
Los renacuajos presentan el espiráculo en el lado izquierdo. Su coloración es negra al nacer, pero conforme avanza su desarrollo, se van aclarando hasta tener una coloración marronosa. No es raro que hayan machitas doradas tanto en el vientre como en la cola de los renacuajos. La vida media de estos anuros es de unos 10 años.
Las ranas, al igual que muchos otros anfibios, pueden ser venenosas, a continuación, mosatramos una rana venenosa.
URODELOS: (adultos con cola)
Los urodelos, también llamados caudados por la presencia en ellos de una fuerte cola, que les impulsa en la natación, son formados por un grupo de unas 300 especies conocidas, y habitan principalmente en el hemisferio norte.
Los urodelos son anfibios con el cuerpo alargado, piel desnuda y con glándulas, a veces venenosas, provistos de cola y con cuatro patas de adultos, con 4 dedos en las extremidades delanteras y 5 en las traseras, aunque algunas especies tienes atrofiadas las dos posteriores.
Estos animales son más antiguos que las ranas y los sapos, y son los anfibios más unidos al medio acuático.
La fecundación es interna o externa, y como las larvas y los adultos son parecidos entre sí, la metamorfosis es mucho más sencilla. Son acuáticos. Algunas veces, los adultos conservan las branquias por falta de desarrollo completo.
A este orden pertenecen las salamandras (salamandra común, salamandra salamandra: etc.), tritones (tritón Pirenaico, Euproctus asper; Tritón Palmeado, Triturus helveticus; Tritón Jaspeado, Triturus marmoratus; etc.), Sirenas, Gallipatos, etc.
-Dimorfismo sexual:
En el caso de los urodelos y especialmente en tritones, los machos adquieren una coloración llamativa y se convierten en pequeños dragones acuáticos desarrollando, incluso, crestas en algunos casos (Triturus cristatus) Otra característica es la cloaca de los urodelos machos, se les suele hacer más prominente ya que aumenta el tamaño de los testículos y también hay pequeñas diferencias en la longitud de los animales. A diferencia de los anuros, no poseen estructuras para emitir sonidos.
-Apareamiento:
Los urodelos macho, presentan una danza nupcial para atraer a las hembras, después de la cuál, se abrazan e incluso nadan juntos, hasta que tiene lugar la cópula por medio de la fecundación interna, el macho le introduce a la hembra un paquete espermático llamado espermatóforo.
-Puesta de huevos y desarrollo larvario:
Los urodelos suelen adherir sus huevos a las plantas acuáticas aunque hay algunas excepciones donde el urodelo los deposita en tierra, piedras, debajo de troncos, etc.
Del mismo modo que pasaba con los anuros, no todos los urodelos son ovíparos puesto que se dan casos de ovoviviparismo como es el caso de la Salamandra Atra. Este urodelo da a luz a juveniles perfectamente formados que guardan semejanza absoluta con el adulto, y debido a esto, las salamandras no sufren el proceso de la metamorfosis.
Los huevos, en la mayoría de especies son colocados uno a uno sobre la vegetación acuática y muy frecuentemente, la hembra según los va depositando, se encarga de doblar sobre ellos la hoja de modo que garantiza una mayor protección. La incubación de los huevos, al igual que en los anuros, es variable y depende de condiciones ambientales. El tipo de desarrollo embrionario es muy similar con una segmentación total y una gastrulación por ingresión típica.
El desarrollo de las larvas después de la eclosión como veremos a continuación. Tras el periodo de incubación se produce la eclosión de los huevos de los cuales salen unas larvas que sufren una metamorfosis mucho más discreta que en el caso de los anuros. En primer lugar, nacen con branquias externas que mantienen durante toda su vida acuática como larvas hasta que llega el momento de la formación de los pulmones.
Del mismo modo, mantienen la cola que no sufre regresión, lo mantienen incluso en estado adulto. Los urodelos, al contrario de los anuros, se alimentan de presas vivas.
SALAMANDRA:
Es uno de los animales más bellos de nuestra fauna. La apariencia externa de ésta es muy similar a la de los lagartos, sin embargo con anfibios al igual que las ranas, los sapos... Su presencia indica que el entorno está bien conservado, con una buena cobertura vegetal y calidad del agua. Pueden llegar a vivir hasta 24 años.
Las hembras de salamandra pueden ser ovovivíparas o vivíparas. En los casos de viviparismo se dan casos de canibalismo intrauterino entre las larvas (adelfofagia)
Se clasifican en: Anfiumidas, perritos de agua, salamandras, salamandras asiáticas, salamandras gigantes, salamandras norteamericanas, salamandras olímpicas, salamandras sin pulmón, salamandras topos y sirenas.
Es de talla mediana-grande, en la Península Ibérica puede superar los 250mm de longitud total. La cabeza es robusta, con grandes glándulas parótidas, en las que son visibles una serie de poros glandulares, situados detrás de unos ojos prominentes con pupilas marrones redondeadas. El cuerpo es de sección cilíndrica, de piel lisa con surcos en los costados y poros glandulares que se dividen a lo largo del cuerpo negando hasta el principio de la cola. El dibujo de la piel es muy variable, aunque suele tener una base negra salpicada de manchas amarillas (salamandra común) que pueden variar en forma y tamaño según la subespecie. La cola es de sección cilíndrica o un poco comprimida. Las patas son cortas con 4 dedos en las anteriores y 5 en las posteriores. El vientre es oscuro y en ocasiones presenta manchas más claras.
El dimorfismo sexual no es muy acusado, aunque los machos son más estilizados y tienen la cola más larga. En la época nupcial, presenta la zona cloacal abultada. Las hembras son por lo general más robustas, con patas algo más cortas y un mayor peso en condiciones normales. La característica morfología de la salamandra, hace que no la confundamos con el resto de los urodelos.
LARVAS: En el momento de nacer, las larvas de salamandra tienen una longitud total de entre 24mm y 36mm, rango éste muy variable según las condiciones geográficas y ambientales. La cabeza es ancha y de gran tamaño con penachos branquiales rosados, variables en tamaño según la oxigenación del agua donde habiten. Los ojos son grandes y bien definidos con los que detectan movimiento a más de 50cm. El cuerpo está lateralmente algo aplanado, y es un poco más largo que la cola. Ésta se presenta comprimida y tiene una cresta dorsal que nace hacia la mitad del tronco. El final de la cola suele ser redondeado. En el dibujo de la piel discurren manchas paralelas de color verde oliváceo sobre un verde amarillento más pálido. . Las patas son robustas, no muy largas, y al igual que los adultos, presentan 4 dedos en las anteriores y 5 en las posteriores. En el momento que completan la metamorfosis y abandonan el agua, miden entre 60mm y 65mm, dándose casos de tallas mayores. Así ocurre por ejemplo cuando las larvas no pueden salir de un pozo donde haya descendido mucho el nivel freático. En estos casos, pueden alcanzar tallas de hasta 95mm y resulta sorprendente ver estos ejemplares tan grandes conservar las branquias completamente desarrolladas.
Su actividad es predominantemente nocturna, aunque en climas húmedos se les puede observar de día, durante jornadas lluviosas y de temperaturas suaves. Sus poblaciones en la inmensa mayoría de los lugares, se han visto relegadas a zonas montañosas que conservan arroyos prístinos y zonas boscosas bien conservadas. Es más frecuente en bosques de fronda al conservar éstos una mayor humedad ambiental. Generalmente ocupan zonas de orientación umbría y tienen un dominio vital de entre 10 y 150 metros. Algunos individuos pueden pasar largas temporadas bajo la misma piedra o tronco.
La actividad de las salamandras varía en función de la región en que habite. En el norte de España, se muestran activas desde principios de otoño hasta principios de invierno, reactivándose de nuevo en primavera, hasta principios de verano. En el sur, su período de mayor actividad es en los mecedse noviembre y febrero, coincidiendo con la época de mayor pluviosidad. Su temperatura ideal es en torno a los 14ºC, y la altitud más frecuentada por la especie está en torno a los 1000m de altitud, aunque dicho dato varía.
La época de apareamiento se reparte en dos épocas; mediados de otoño y finales de invierno o primavera. Los acoplamientos tienen lugar en tierra. Cuando el macho localiza a una hembra, corre hasta ella acosándola y subiéndose a su espalda. En esta posición consigue inmovilizarla. A continuación, se sitúa debajo de ella, y con un ligero frote de su lomo consigue embelesarla. Ambos comienzan a realizar movimientos laterales de la cabeza, y el macho contorsiona su cuerpo y cola. Tras permanecer unidos durante unos minutos, el macho deposita un espermatóforo de unos 10mm de longitud en el suelo. Entonces coloca a la hembra en la posición adecuada para que lo absorba a través de su cloaca. Posteriormente se separan. Las hembras tienen la capacidad de retener en su interior el esperma el tiempo necesario hasta que las condiciones ambientales sean propicias para que tenga lugar la ovulación. Por lo tanto, el período de gestación puede ser muy largo, hasta 8 más meses.
Las salamandras a diferencia del resto de casi todos los anfibios, no ponen sus huevos en el agua. Son ovovivíparos, es decir, los huevos se desarrollan dentro del útero materno y posteriormente paren larvas en el agua.
Para depositar las larvas, seleccionan arroyos limpios y no muy caudalosos. En ausencia de éstos, también utilizan albercas, fuentecillas y abrevaderos para ganado. .
La duración del desarrollo acuático de las larvas es muy variable, y depende de distintos factores, fundamentalmente del tamaño que tenían al nacer, de la temperatura del agua, y de la disponibilidad de alimento.
Son muy voraces y localizan activamente dafneas, tricópteros, plecópteros, dípteros, etc. Siendo incluso caníbales y llegando a consumir a otros congéneres casi de su mismo tamaño. A su vez ellas pueden ser devoradas por larvas de libélulas, ditiscos, escorpiones acuáticos, culebras y otros anfibios.
La alimentación de las salamandras adultas se compone de ciempiés, escolopendras, cochinillas de la humedad, babosas, termitas y hormigas, dípteros, arañas, pequeños coleópteros y sus larvas y otros invertebrados. Alcanzan la madurez sexual a los 2 o 3 años y pueden vivir hasta 15 o 20.
Tanto los ejemplares juveniles como los adultos liberan a través de las glándulas parótidas y por los poros glandulares una sustancia lechosa que contiene una toxina llamada salamandrina, posee efectos neurotóxicos y es un buen repelente contra muchos depredadores. El llamativo dibujo de su piel, es también un elemento disuasorio frente a sus enemigos, ya que la asociación de algunos colores en la naturaleza (aposematosis) indica señal de peligro. Tiene enemigos naturales como las víboras, culebras de collar, algunas aves y mamíferos como el turón o el jabalí.
GALLIPATOS:Nombre científico: pleurodeles waltl. Son los urodelos más abundantes. Soportan muy bien la contaminación y son fáciles de ver en arroyos, charcas, albercas, piscinas, pozos... en noches de lluvia.
Es uno de los urodelos de mayor tamaño, llegando a medir hasta 30 cm. Presenta como curiosidad un mecanismo de defensa sorprendente. Cuando se ve atacado o capturado, traspasa su propia piel con sus afiladas costillas de manera que si se le coge bruscamente puede provocar pinchazos.
DESCRIPCIÓN: Su cabeza en ancha, comprimida y los ojos son pequeños, algo adelantados y prominentes, de color marrón o grisáceo, y con pupilas redondas negras. No tienes párpados. El hocico es bastante redondeado.
La piel es rugosa y está cubierta de multitud de pequeños tubérculos terminados en punta negra. La coloración es marrón, olivácea, aunque depende de las variedades ecológicas.
La cola, bastante musculosa, es más larga que la cabeza y el cuerpo juntos, y está comprimida lateralmente. En su parte superior tiene una cresta que aparece más desarrollada durante la época de celo. Las extremidades posteriores tienen 5 dedos, y son más largas que las posteriores que tienen 4 dedos.
Los machos son más estilizados que las hembras, tienen la cola y las patas más largas y durante el celo desarrollan unas callosidades nupciales negruzcas en patas y brazos que facilitan el acoplamiento. Las hembras alcanzan mayores tamaños, con un tronco más engrosado.
LARVAS: Pueden confundirse con las de tritón pigmeo, aunque alcanzan mayor tamaño que las de dicho tritón. Tienen los dedos bastante largos y las branquias muy desarrolladas, semejantes a unos plumeros. La cresta caudal comienza en el extremo posterior de la cabeza y no tienen al final de la cola los típicos lunares negros del tritón.
El gallipato es una especie típicamente mediterránea, poco exigente en cuanto a las características del medio que ocupa, tanto terrestre como acuático. Lo podemos encontrar en zonas bien conservadas y también en otras bastante alteradas: lindes de cultivos no intensivos, pinares de repoblación, quejigales, encinares, adehesados o no, etc.
Lleva una vida principalmente nocturna y terrestre, y durante el día se oculta bajo piedras, troncos o cavidades subterráneas. En la fase acuática y en el celo, puede ser muy activo durante las horas de luz.
Finalizado el verano, época en la que permanecen inactivos en sus refugios terrestres, y con la llegada de las primeras lluvias, se dirigen a las zonas húmedas, que utilizarán para reproducirse.
Originariamente, usaban charcas naturales y zonas remansadas de arroyos con poca corriente con o sin vegetación acuática. La progresiva alteración por parte del hombre de estos hábitats, les obliga hoy en día a buscar cualquier punto de agua que permita el desarrollo de las larvas, ya sea alberca, piscina, pozo o abrevadero para el ganado. Cuando caen lugares de los cuales no pueden salir, se vuelven completamente acuáticos. No son muy exigentes en cuanto a la calidad de las aguas, y soportan un amplio rango de temperaturas, desde los 0ºC a más de 20ºC. El agua no debe estar necesariamente limpia, y es abundante en zonas de gran turbidez debido a sedimentos en suspensión, donde no necesita su insuficiente vista y se alimenta gracias al olfato. Así mismo tolera cierto grado de contaminación.
Los machos suelen llegar primero a los lugares de puesta, y si estos no tienen agua, porque las precipitaciones hayan sido escasas, permanecen escondidos en las inmediaciones a la espera de que haya la suficiente. El macho, tras reconocer a la hembra por su olor, se sitúa debajo de ella sujetándola con sus brazos y colocándosela a la espalda. En esta posición pueden permanecer varias horas e incluso días. A continuación suelta un brazo y se voltea, estimulando a la hembra y depositando en el suelo una serie de pequeñas bolsas (6 o 7) que contienen espermatozoides. Estas bolsas se denominan espermatóforos. La hembra los recoge ayudándose de las patas y los introduce en su oviducto, momento en el cual se separan. Si existen muchos machos, las cópulas pueden ser disputadas y en las trifulcadas consiguientes algún macho ajeno puede depositar su propio espermatóforo cerca de la hembra o de algún contrincante.
Tras uno o dos días la hembra comienza a poner los huevos, unos 150 las más jóvenes y más de 1300 las mayores. Al contactar con el agua se hinchan y alcanzan un centímetro de diámetro, siendo depositados en grupos o sueltos sobre las plantas u otros objetos del fondo de la charca. Pasadas dos semanas, aparecen pequeñas larvas, de apenas 1cm de longitud. Cuando son pequeñas se alimentan de plancton, y a medida que van creciendo se van haciendo más voraces, capturando invertebrados e incluso larvas de su misma especie o de otros anfibios. Su desarrollo depende de las condiciones del lugar, aunque por lo general, pierden las branquias a los 4 meses, cuando miden entre 7 u 8 cm de longitud.
Los pequeños gallipatos abandonan el agua coincidiendo con las primeras lluvias otoñales, dispersándose por los alrededores. En años húmedos se puede producir una verdadera explosión demográfica, como lo que sucedió en el año 1996 en una charca del municipio de Íllora. La cercanía de una carretera supuso la muerte de miles de subadultos (como el que se muestra en la fotografía superior), que comenzaban su etapa terrestre. La madurez sexual la alcanzan a partir del año y medio y pueden vivir más de 20 años en cautividad.
Se alimentan de pequeños invertebrados, a los que localizan, como ya hemos dicho, por su olfato, e incluso por sus movimientos. Al igual que las larvas, los adultos son muy voraces.
Sus principales enemigos naturales son las culebras de agua y algunas aves acuáticas como las garzas. Los peces introducidos, y el cangrejo americano, que ataca principalmente a las puestas y a las larvas.
TRITONES:
Los tritones son anfibios de la familia Salamandridae y del orden de los urodelos, los encontramos repartidos por todo el hemisferio norte y algunas especies en América del sur. Casi todo el tiempo son anfibios terrestres, aunque los europeos, por ejemplo, prefieren el agua para los períodos de reproducción.
Tienen la piel muy sensible, ya que como anfibio que es, realiza parte de su respiración a través de ella, y la mudan un par de veces al año. Suelen ser de color pardo con manchas circulares negras y su vientre es amarillento. Además tienen la capacidad de regenerar miembros perdidos.
MucDespués del cortejo, el macho deposita en el fondo de la charca sus espermatóforos, consistente en pequeños conos truncos de consistencia gelatinosa donde se alojan los espermios, los que la hembra recoge con sus labios cloacales, asegurando la fecundación interna. Quince días después nacerán las crías, y una vez que éstas terminan su metamorfosis, salen del agua para comenzar a sobrevivir en su etapa adulta.
Los tritones se alimentan con facilidad de pequeños invertebrados, larvas de mosquitos, alevines...
ALGUNAS ESPECIES DE TRITONES:
Tritón Pigmeo: fue considerado una subespecie del tritón jaspeado, aunque recientes estudios han demostrado que las diferencias morfológicas y genéticas existentes entre ambos son suficientes como para considerarlos especies diferentes.
Posee una talla que no supera los 14cm de longitud total, de los cuales, algo más de la mitad corresponden a la cola. La cabeza es algo más larga que ancha, un poco estrecha y con un hocico ancho y redondeado. Los ojos, no muy grandes, tienen la pupila redondeada de color negro e iris dorado.
Las extremidades son largas con dedos no palmeados, 4 en las anteriores y 5 en las posteriores.
Lo más llamativo es el colorido, un verde intenso jaspeado de manchas negras a lo largo del cuerpo.
La cola, más larga en los machos, está comprimida lateralmente y acabada en punta. Durante la fase acuática presenta una cresta, más desarrollada en los machos. Las hembras son de mayor tamaño y poseen una línea vertebral anaranjada, amarillenta o rojiza, que también muestran los individuos subadultos de ambos sexos. Existe dimorfismo que se acentúa en extremo en la etapa reproductiva. Durante éste y para ejemplares en fase acuática, los machos desarrollan una cresta dorsal, desde el final de la cabeza hasta la base de la cola, donde comienza una segunda cresta caudal.
LARVAS: al nacer tienen unos 5mm de longitud con un tono amarillento y la piel translúcida. La zona ventral es plateada y rosácea. Poseen branquias externas que recuerdan pequeñas plumas rojizas. Su principal característica son sus alargadas y desproporcionadas extremidades, finalizadas en dedos largos. La cola también bastante larga, está comprimida lateralmente y acabada en una fina punta de manchas oscuras redondeadas en la punta. Este es el principal rasgo diferenciador de las larvas de gallipato, muy similares en las primeras fases del desarrollo.
Al igual que otros anfibios, lleva una vida crepuscular y nocturna, teniendo mayor duración la fase acuática que la terrestre. Fuera del agua se refugian bajo piedras, troncos . Salen de sus refugios en noches lluviosas o con humedad elevada, para alimentarse o dirigirse a los lugares de reproducción.
Para ello es más exigente que el gallipato, y selecciona aguas más oxigenadas, no muy eutrofizadas y con abundante vegetación acuática.
Cuando llega el otoño, en estado de semi-letargo en algún refugio, se dirigen a los puntos de reproducción.
Los machos son los primeros en llegar, y defienden un pequeño territorio incluso atacando y mordiendo a aquellos que osan acercársele. Una vez en el agua empiezan a desarrollar sus espectaculares crestas y aumentan notablemente el tamaño de sus cloacas.
Cuando una hembra se acerca, el macho se sitúa delante de ella y comienza a realizar movimientos ondulatorios con la cola, elevando y arqueando la parte superior de su cuerpo. Con ello trata de estimular a la hembra, que entonces permanece quieta esperando a que el macho deposite su espermatóforo que contiene los espermatozoides necesarios para la fecundación de los óvulos que ella guarda en su abultado abdomen. A continuación se sitúa sobre esta pequeña bolsa y ayudándose con sus labios cloacales la absorbe. Es posible que una hembra sea fecundada por distintos machos. A los pocos días comienza a poner huevos, desprendiéndolos uno a uno y envolviéndolos con la ayuda de sus patas traseras sobre las hojas de las plantas acuáticas. Últimamente dada la escasez de éstas, los huevos son fijados sobre plásticos arrojados al agua. El número de huevos es en torno a 300, depende del estado de alimentación y desarrollo de la hembra.
Las larvas eclosionan unos días después, dependiendo de la temperatura del agua. Son muy activas y cazan pequeños insectos, crustáceos, e incluso larvas de otros anfibios a los que localizan por el movimiento. El desarrollo larvario dura unos tres o cuatro meses, dependiendo de la temperatura del agua y la disponibilidad de alimento, momento en el cual, los pequeños tritones pierden las branquias y se dirigen a la tierra buscando un refugio en el que pasar el verano, aunque muchas de ellas son capturadas en el intento. La madurez sexual la alcanzan a los 2 o 3 años, los machos antes, y pueden vivir entre 10 y 12 años.
La alimentación de los adultos se basa en invertebrados, tanto acuáticos como terrestres, y las larvas de otros anfibios.
Sus principales enemigos naturales son las culebras de agua, garzas, peces introducidos como la carpa, galápagos, y el cangrejo americano (depende de la fauna del lugar donde habiten los tritones) Su principal mecanismo de defensa es la producción de sustancias tóxicas de aspecto lechoso a través de la piel y también adopta posturas defensivas arqueando el cuerpo y levantando la cola ante una amenaza.
Toxicidad por anfibios: salamandra, sapos
La salamandra común y muchas variedades de sapos (sapo verde, sapo común, ranita de San Antonio), son habitantes comunes en España.
Su piel secreta una sustancia que resulta tóxica, muy irritante para las mucosas, por lo que se debe lavar las manos tras tocar a uno de ellos. Algún componente de esta toxina ha llegado a ser utilizado por las tribus indígenas amazónicas como veneno para las puntas de las flechas.
En caso de que se produzca el contacto de la sustancia con la piel o mucosas, el efecto que se produce es una mucositis o inflamación de las mucosas afectadas, o una conjuntivitis si se afecta la conjuntiva del ojo.
Si se llegan a chupar las manos después de tocar un sapo, además de la afectación de mucosas ya comentada se producirá un cuadro que consiste en náuseas, vómitos, dolor abdominal y, en los casos severos, hipotensión, bradicardia y síndrome confusional.
En ocasiones, sobre todo en EEUU o en Sudamérica, se han descrito casos de niños que trasllevarse las manos a la boca han sufrido una reacción grave con hipotensión,arritmias , convulsiones y muerte-
El tratamiento consiste en lavar con abundante agua. Hay antídotos como la atripona.
Los machos son más estilizados que las hembras, tienen la cola y las patas más largas y durante el celo desarrollan unas callosidades nupciales negruzcas en patas y brazos que facilitan el acoplamiento. Las hembras alcanzan mayores tamaños, con un tronco más engrosado.
LARVAS: Pueden confundirse con las de tritón pigmeo, aunque alcanzan mayor tamaño que las de dicho tritón. Tienen los dedos bastante largos y las branquias muy desarrolladas, semejantes a unos plumeros. La cresta caudal comienza en el extremo posterior de la cabeza y no tienen al final de la cola los típicos lunares negros del tritón.
El gallipato es una especie típicamente mediterránea, poco exigente en cuanto a las características del medio que ocupa, tanto terrestre como acuático. Lo podemos encontrar en zonas bien conservadas y también en otras bastante alteradas: lindes de cultivos no intensivos, pinares de repoblación, quejigales, encinares, adehesados o no, etc.
Lleva una vida principalmente nocturna y terrestre, y durante el día se oculta bajo piedras, troncos o cavidades subterráneas. En la fase acuática y en el celo, puede ser muy activo durante las horas de luz.
Finalizado el verano, época en la que permanecen inactivos en sus refugios terrestres, y con la llegada de las primeras lluvias, se dirigen a las zonas húmedas, que utilizarán para reproducirse.
Originariamente, usaban charcas naturales y zonas remansadas de arroyos con poca corriente con o sin vegetación acuática. La progresiva alteración por parte del hombre de estos hábitats, les obliga hoy en día a buscar cualquier punto de agua que permita el desarrollo de las larvas, ya sea alberca, piscina, pozo o abrevadero para el ganado. Cuando caen lugares de los cuales no pueden salir, se vuelven completamente acuáticos. No son muy exigentes en cuanto a la calidad de las aguas, y soportan un amplio rango de temperaturas, desde los 0ºC a más de 20ºC. El agua no debe estar necesariamente limpia, y es abundante en zonas de gran turbidez debido a sedimentos en suspensión, donde no necesita su insuficiente vista y se alimenta gracias al olfato. Así mismo tolera cierto grado de contaminación.
Los machos suelen llegar primero a los lugares de puesta, y si estos no tienen agua, porque las precipitaciones hayan sido escasas, permanecen escondidos en las inmediaciones a la espera de que haya la suficiente. El macho, tras reconocer a la hembra por su olor, se sitúa debajo de ella sujetándola con sus brazos y colocándosela a la espalda. En esta posición pueden permanecer varias horas e incluso días. A continuación suelta un brazo y se voltea, estimulando a la hembra y depositando en el suelo una serie de pequeñas bolsas (6 o 7) que contienen espermatozoides. Estas bolsas se denominan espermatóforos. La hembra los recoge ayudándose de las patas y los introduce en su oviducto, momento en el cual se separan. Si existen muchos machos, las cópulas pueden ser disputadas y en las trifulcadas consiguientes algún macho ajeno puede depositar su propio espermatóforo cerca de la hembra o de algún contrincante.
Tras uno o dos días la hembra comienza a poner los huevos, unos 150 las más jóvenes y más de 1300 las mayores. Al contactar con el agua se hinchan y alcanzan un centímetro de diámetro, siendo depositados en grupos o sueltos sobre las plantas u otros objetos del fondo de la charca. Pasadas dos semanas, aparecen pequeñas larvas, de apenas 1cm de longitud. Cuando son pequeñas se alimentan de plancton, y a medida que van creciendo se van haciendo más voraces, capturando invertebrados e incluso larvas de su misma especie o de otros anfibios. Su desarrollo depende de las condiciones del lugar, aunque por lo general, pierden las branquias a los 4 meses, cuando miden entre 7 u 8 cm de longitud.
Los pequeños gallipatos abandonan el agua coincidiendo con las primeras lluvias otoñales, dispersándose por los alrededores. En años húmedos se puede producir una verdadera explosión demográfica, como lo que sucedió en el año 1996 en una charca del municipio de Íllora. La cercanía de una carretera supuso la muerte de miles de subadultos (como el que se muestra en la fotografía superior), que comenzaban su etapa terrestre. La madurez sexual la alcanzan a partir del año y medio y pueden vivir más de 20 años en cautividad.
Se alimentan de pequeños invertebrados, a los que localizan, como ya hemos dicho, por su olfato, e incluso por sus movimientos. Al igual que las larvas, los adultos son muy voraces.
Sus principales enemigos naturales son las culebras de agua y algunas aves acuáticas como las garzas. Los peces introducidos, y el cangrejo americano, que ataca principalmente a las puestas y a las larvas.
TRITONES:
Los tritones son anfibios de la familia Salamandridae y del orden de los urodelos, los encontramos repartidos por todo el hemisferio norte y algunas especies en América del sur. Casi todo el tiempo son anfibios terrestres, aunque los europeos, por ejemplo, prefieren el agua para los períodos de reproducción.
Tienen la piel muy sensible, ya que como anfibio que es, realiza parte de su respiración a través de ella, y la mudan un par de veces al año. Suelen ser de color pardo con manchas circulares negras y su vientre es amarillento. Además tienen la capacidad de regenerar miembros perdidos.
MucDespués del cortejo, el macho deposita en el fondo de la charca sus espermatóforos, consistente en pequeños conos truncos de consistencia gelatinosa donde se alojan los espermios, los que la hembra recoge con sus labios cloacales, asegurando la fecundación interna. Quince días después nacerán las crías, y una vez que éstas terminan su metamorfosis, salen del agua para comenzar a sobrevivir en su etapa adulta.
Los tritones se alimentan con facilidad de pequeños invertebrados, larvas de mosquitos, alevines...
ALGUNAS ESPECIES DE TRITONES:
Tritón Pigmeo: fue considerado una subespecie del tritón jaspeado, aunque recientes estudios han demostrado que las diferencias morfológicas y genéticas existentes entre ambos son suficientes como para considerarlos especies diferentes.
Posee una talla que no supera los 14cm de longitud total, de los cuales, algo más de la mitad corresponden a la cola. La cabeza es algo más larga que ancha, un poco estrecha y con un hocico ancho y redondeado. Los ojos, no muy grandes, tienen la pupila redondeada de color negro e iris dorado.
Las extremidades son largas con dedos no palmeados, 4 en las anteriores y 5 en las posteriores.
Lo más llamativo es el colorido, un verde intenso jaspeado de manchas negras a lo largo del cuerpo.
La cola, más larga en los machos, está comprimida lateralmente y acabada en punta. Durante la fase acuática presenta una cresta, más desarrollada en los machos. Las hembras son de mayor tamaño y poseen una línea vertebral anaranjada, amarillenta o rojiza, que también muestran los individuos subadultos de ambos sexos. Existe dimorfismo que se acentúa en extremo en la etapa reproductiva. Durante éste y para ejemplares en fase acuática, los machos desarrollan una cresta dorsal, desde el final de la cabeza hasta la base de la cola, donde comienza una segunda cresta caudal.
LARVAS: al nacer tienen unos 5mm de longitud con un tono amarillento y la piel translúcida. La zona ventral es plateada y rosácea. Poseen branquias externas que recuerdan pequeñas plumas rojizas. Su principal característica son sus alargadas y desproporcionadas extremidades, finalizadas en dedos largos. La cola también bastante larga, está comprimida lateralmente y acabada en una fina punta de manchas oscuras redondeadas en la punta. Este es el principal rasgo diferenciador de las larvas de gallipato, muy similares en las primeras fases del desarrollo.
Al igual que otros anfibios, lleva una vida crepuscular y nocturna, teniendo mayor duración la fase acuática que la terrestre. Fuera del agua se refugian bajo piedras, troncos . Salen de sus refugios en noches lluviosas o con humedad elevada, para alimentarse o dirigirse a los lugares de reproducción.
Para ello es más exigente que el gallipato, y selecciona aguas más oxigenadas, no muy eutrofizadas y con abundante vegetación acuática.
Cuando llega el otoño, en estado de semi-letargo en algún refugio, se dirigen a los puntos de reproducción.
Los machos son los primeros en llegar, y defienden un pequeño territorio incluso atacando y mordiendo a aquellos que osan acercársele. Una vez en el agua empiezan a desarrollar sus espectaculares crestas y aumentan notablemente el tamaño de sus cloacas.
Cuando una hembra se acerca, el macho se sitúa delante de ella y comienza a realizar movimientos ondulatorios con la cola, elevando y arqueando la parte superior de su cuerpo. Con ello trata de estimular a la hembra, que entonces permanece quieta esperando a que el macho deposite su espermatóforo que contiene los espermatozoides necesarios para la fecundación de los óvulos que ella guarda en su abultado abdomen. A continuación se sitúa sobre esta pequeña bolsa y ayudándose con sus labios cloacales la absorbe. Es posible que una hembra sea fecundada por distintos machos. A los pocos días comienza a poner huevos, desprendiéndolos uno a uno y envolviéndolos con la ayuda de sus patas traseras sobre las hojas de las plantas acuáticas. Últimamente dada la escasez de éstas, los huevos son fijados sobre plásticos arrojados al agua. El número de huevos es en torno a 300, depende del estado de alimentación y desarrollo de la hembra.
Las larvas eclosionan unos días después, dependiendo de la temperatura del agua. Son muy activas y cazan pequeños insectos, crustáceos, e incluso larvas de otros anfibios a los que localizan por el movimiento. El desarrollo larvario dura unos tres o cuatro meses, dependiendo de la temperatura del agua y la disponibilidad de alimento, momento en el cual, los pequeños tritones pierden las branquias y se dirigen a la tierra buscando un refugio en el que pasar el verano, aunque muchas de ellas son capturadas en el intento. La madurez sexual la alcanzan a los 2 o 3 años, los machos antes, y pueden vivir entre 10 y 12 años.
La alimentación de los adultos se basa en invertebrados, tanto acuáticos como terrestres, y las larvas de otros anfibios.
Sus principales enemigos naturales son las culebras de agua, garzas, peces introducidos como la carpa, galápagos, y el cangrejo americano (depende de la fauna del lugar donde habiten los tritones) Su principal mecanismo de defensa es la producción de sustancias tóxicas de aspecto lechoso a través de la piel y también adopta posturas defensivas arqueando el cuerpo y levantando la cola ante una amenaza.
Toxicidad por anfibios: salamandra, sapos
La salamandra común y muchas variedades de sapos (sapo verde, sapo común, ranita de San Antonio), son habitantes comunes en España.
Su piel secreta una sustancia que resulta tóxica, muy irritante para las mucosas, por lo que se debe lavar las manos tras tocar a uno de ellos. Algún componente de esta toxina ha llegado a ser utilizado por las tribus indígenas amazónicas como veneno para las puntas de las flechas.
En caso de que se produzca el contacto de la sustancia con la piel o mucosas, el efecto que se produce es una mucositis o inflamación de las mucosas afectadas, o una conjuntivitis si se afecta la conjuntiva del ojo.
Si se llegan a chupar las manos después de tocar un sapo, además de la afectación de mucosas ya comentada se producirá un cuadro que consiste en náuseas, vómitos, dolor abdominal y, en los casos severos, hipotensión, bradicardia y síndrome confusional.
En ocasiones, sobre todo en EEUU o en Sudamérica, se han descrito casos de niños que trasllevarse las manos a la boca han sufrido una reacción grave con hipotensión,arritmias , convulsiones y muerte-
El tratamiento consiste en lavar con abundante agua. Hay antídotos como la atripona.
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